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La ascensión del rey Mohammed IV al trono de Marruecos en 1999 desencadenó una serie de eventos que permitieron que el sector inmobiliario marroquí se convirtiera en un objetivo para los inversores inmobiliarios de todo el mundo.

Un reformador ambicioso, King Mohammed está detrás del plan Vision 2010, que tiene como objetivo aumentar el número de visitantes a 10 millones por año para 2010, y construir 250,000 nuevas habitaciones de hotel.

Hasta ahora parece estar funcionando. En 2007, 7,4 millones de turistas extranjeros visitaron Marruecos y esta afluencia de visitantes llevó a los inversores extranjeros, incluidos miles de británicos, a comprar villas y apartamentos en las zonas costeras que se espera desarrollar en el marco de Visión 2010.

Conocido como el Plan Azur, esta parte de la estrategia del Rey Mohammed requiere la construcción de seis nuevos centros turísticos junto al mar en áreas como Plage Blanche y Lixux. Marrakech, Tánger y Agadir también son populares en la costa atlántica.

Los inversores también están cada vez más interesados ​​en bienes raíces en Fez, la tercera ciudad del país, donde los precios siguen siendo bajos en comparación con los bienes raíces en Marrakech, por ejemplo.

En Marruecos, el crecimiento económico aumentó un 6,5% en el segundo trimestre de 2008, pero, como en la mayoría de las economías mundiales, el país atraviesa un período más difícil.

Las autoridades dicen que se espera que el número de visitantes en 2008 sea menor que en 2007, ya que la crisis crediticia y la disminución de los ingresos disponibles están afectando el turismo.

Estos factores también afectan el mercado inmobiliario, pero el hecho de que el ritmo de desarrollo esté bajo control debería significar que, a diferencia de su vecino cercano, España, Marruecos no sufrirá un exceso de oferta.

Una vez que el polvo se haya asentado en la desaceleración económica mundial, Marruecos también podría aprovechar el hecho de que sigue habiendo una economía de bajo costo: los occidentales pueden pasar sus vacaciones aquí a bajo precio y los expatriados disfrutan del bajo costo de vida en el país.

Los rendimientos de alquiler en Marruecos están actualmente en el rango de 6.5 a 8%, lo que puede parecer modesto en comparación con ciertos mercados emergentes, pero que también debería ser sostenible en el mediano plazo.

Las hipotecas con un préstamo de hasta el 70% están disponibles para los extranjeros en Marruecos, aunque los bancos se han vuelto más cautelosos ante la crisis crediticia.

Los precios inmobiliarios de Marruecos aumentaron un 20% en 2006 y un 15% en 2007. Las cifras para 2008 aún no están disponibles, aunque las tasas de crecimiento probablemente hayan disminuido ligeramente.